jueves, 22 de noviembre de 2012

Como criar futuros delincuentes


                                   Como criar futuros delincuentes 
  1. La policía de Houston, Texas, distribuyó un curioso y acertado panfleto titulado: “ Cómo criar hijos delincuentes.” El contenido decía lo siguiente:
  2.  Déle a su hijo todo lo que pida. De esta manera su hijo crecerá pensando que tiene derecho a obtener todo lo que desea.
  3.  Ríase cuando su hijo diga malas palabras. De esta manera su hijo crecerá pensando que el vocabulario soez divierte a la gente y se esforzará por incrementar su repertorio de malas palabras.
  4.  Jamás oriente a su hijo en el área espiritual. Deje que cuando sea adulto él decida lo que quiera creer. No reprenda y no discipline a su hijo por su mal comportamiento, “podría dañar su autoestima”. De esta manera su hijo crecerá pensando que no existen reglas en la sociedad.
  5.  Recoja todo lo que su hijo desordena. De esta manera su hijo crecerá creyendo que otros deben hacerse cargo de sus responsabilidades.
  6.  Permítale ver cualquier programa en la televisión. De esta manera su hijo crecerá con una mentalidad “abierta y desinhibida”.
  7.  Peléense delante de sus hijos. De esta manera, sus hijos no se sorprenderán cuando tengan que divorciarse. (además crecerán con mucha rabia dentro de ellos)
  8. Dé a su hijo todo el dinero que pida. De esta manera su hijo crecerá pensando que obtener dinero es fácil y no dudará en robar para conseguirlo.
  9. Al final había una nota que decía: “ Siguiendo estas instrucciones le garantizamos que su hijo será un delincuente y nosotros tendremos una celda lista para él” (Texto tomado de internet)
  10. Y yo agregaría: Si su niño le da un manazo o un puntapié, celébreselo, ¡ría con sus ocurrencias!, al fin y al cabo es solo un niño. (¡Fomente su agresividad y falta de respeto!) Deje que su hijo maltrate animalitos, ¡está conociendo la naturaleza! (Se ha comprobado que los asesinos en serie, comenzaron maltratando animales)
  11. Papá, mamá ¿están practicando alguno o algunos de estos errores en la crianza de sus hijos? ¡CUIDADO!
  12. En la sociedad actual, se suaviza todo lo que antes se llamaba por su nombre. Antes se decía niño malcriado, ahora se dice niño hiperactivo. Antes se disciplinaba, se imponían reglas, se regañaba, se enseñaban buenos modales. Ahora no se puede, “no hay que limitar al niño, hay que dejarlo hacer lo que quiera, porque si no, ¡se puede traumar!” Estos métodos modernos, lo único que han hecho es producir niños y adolescentes groseros e insolentes con padres y maestros.
  13. Se han perdido los valores, porque como a los niños se les debe dejar hacer lo que quieran, no aprenden la diferencia entre el bien y el mal. Una nalgada, puede significar la denuncia de parte de un vecino e incluso hay niños que han amenazado a sus padres con denunciarlos si se atreven a castigarlos. La educación es la herencia más grande que les podemos dejar a nuestros hijos. Es a la vez una herencia para la sociedad misma, ya que solo pueden formarse hombres y mujeres íntegros, útiles a la sociedad, a través de una educación que incluya buenos valores y responsabilidad.
  14. No corregir al hijo es no quererlo; amarlo es disciplinarlo. Proverbios 13:24 Disciplina a tu hijo, y te traerá tranquilidad; te dará muchas satisfacciones."
               Circula en WWW
ARTE


                                 ARTE                           

sábado, 10 de noviembre de 2012

la autoestima


La autoestima es el entendimiento valorativo de nuestro ser, es decir, el acto racional de valorar en cualquier momento y bajo cualquier circunstancia el cuerpo y la mente que conforman nuestra personalidad.
La autoestima es un proceso interno que comienza con aceptarse uno mismo, con el perdón de nuestros errores y el convencimiento positivo de que cada día podemos ser mejores sin llevar a cuestas las culpas del pasado.
Es importantísimo tener autoestima. Todos la necesitamos porque esta nos ayuda a estar contentos, nos ayuda a mantener valores morales y a sentirnos satisfechos con nuestros pensamientos y nuestras acciones.
Tener una autoestima saludable es el primer paso para poder salir de algunas trampas impuestas por las emociones negativas, como es la de sentirnos víctimas; víctimas del tiempo, víctimas de otras personas, víctimas de todo. Si nos convencemos fatalmente que somos víctimas nos entregamos al absurdo inútil de sentir lástima por nosotros mismos, y con esta idea será imposible crecer una auto imagen positiva y poderosa, porque nos habremos rendido ante el soldado obscuro de la autoestima baja.
Para trabajar hacia una autoestima alta y fortalecida es imprescindible limpiarnos de ideas erróneas acerca de la vida, de creer que nadie nos quiere, que nadie nos ayuda, que alguien nos debe algo o que alguien nos está quitando algo. Por el contrario, debemos pensar que nosotros somos valientes y capaces para lograr cumplir aquello positivo que nos propongamos.
En este asunto de la autoestima, un factor determinante es la imagen de sí mismo. La imagen de sí mismo y la autoestima se relacionan porque si tenemos una imagen fuerte y saludable de nosotros mismos nuestra autoestima será así también: fuerte y saludable. Sin embargo, si la imagen que poseemos de nosotros es débil y borrosa, nuestra autoestima será débil y borrosa.
Fundamentalmente la imagen de uno mismo se forma a través de aquello que los demás nos dijeron sobre nosotros cuando fuimos pequeños, las conclusiones que sacamos a partir de como los otros nos calificaron. Cuando éramos pequeños nuestros padres o maestros afirmaron algo con respecto a nuestra imagen y de acuerdo a estos comentarios sacamos conclusiones a veces negativas. Toda esta información ha creado una confusión interna de quienes somos y de cuales son nuestras capacidades, por lo tanto crecemos con muchas contradicciones y terminamos desarrollando una autoestima baja . En forma contraria, si podemos clarificar estas confusiones y convencernos por nosotros mismos, no por lo que los otros nos digan, que somos dueños de valiosísimos talentos y virtudes, de una tremenda fuerza interior, entonces tendremos una autoestima alta.
La autoestima es un recurso integral y complejo del desarrollo personal. Las debilidades del autoestima afectan la salud, las relaciones y la productividad, mientras que su robustecimiento potencia a la persona a desarrollar una adecuada adaptabilidad social y productiva.
La autoestima nos proporciona valor para poder creer en nosotros y en lo que podemos lograr a través del tiempo. Nos permite respetarnos, incluso cuando cometemos errores. Y cuando uno se respeta, por lo general, los demás también aprenden a hacerlo.
La alta autoestima es el medio más efectivo para tomar buenas decisiones relacionadas con nuestra mente y cuerpo. Porque al saber que somos importantes es menos probable que nos dejemos arrastrar por malos consejos o malas compañías. Si poseemos una alta autoestima, sabremos entonces que somos lo suficientemente inteligentes como para tomar caminos acertados, valorando nuestra seguridad física y emocional.
Si la a autoestima es saber que uno es valioso y eso te va a ser feliz, ¿¿¿qué estás esperando???. Abandona esa autoestima baja y empieza a desarrollar una autoestima alta. Nunca olvides que tú vales mucho, que tú mente y tu cuerpo son tus mayores tesoros.


"Cuando me amé de verdad, comprendí que en cualquier circunstancia, yo estaba en el lugar correcto y en el momento preciso. Y, entonces, pude relajarme... Hoy sé que eso tiene nombre, autoestima."

Autor: Charles Chaplin
Citado por la página del facebook: Cosas de Mery Su
Fuente: INTERNET  






jueves, 8 de noviembre de 2012

Las manos que oran


En el siglo XV, en una pequeña aldea cercana a Núremberg, vivía una familia con varios hijos. Para poner pan en la mesa para todos, el padre trabajaba casi 18 horas diarias en las minas, como orfebre y joyero, y en cualquier otra cosa que se le presentara. Dos de sus hijos tenían un sueño: querían dedicarse a la pintura.
    Pero sabían que su padre jamás podría enviar a ninguno de ellos a estudiar a la Academia. Después de muchas noches de conversaciones calladas, los dos hermanos llegaron a un acuerdo. Lanzarían al aire una moneda, y el perdedor trabajaría en las minas para pagar los estudios al que ganara. Al terminar sus estudios, el ganador pagaría entonces los estudios al que quedara en casa con las ventas de sus obras.

Así, los dos hermanos podrían ser artistas.Lanzaron al aire la moneda un domingo al salir de la Iglesia. Uno de ellos, llamado Alberto Durero (o Albrecht Dürer en alemán), ganó y se fue a estudiar a Núremberg.
   Entonces el otro hermano, Albert, comenzó el peligroso trabajo en las minas, donde permaneció por los próximos cuatro años para sufragar los estudios de su hermano, que desde el primer momento fue toda una sensación en la Academia.
   Los grabados de Alberto, sus tallados y sus óleos llegaron a ser mucho mejores que los de muchos de sus profesores, y para el momento de su graduación, ya había comenzado a ganar considerables sumas con las ventas de su arte.Cuando el joven artista regresó a su aldea, la familia Durero se reunió para una cena festiva en su honor. Al finalizar la memorable velada, Alberto se puso de pie en su lugar de honor en la mesa, y propuso un brindis por su hermano querido,  habia sacrificado trabajando en las minas para hacer sus estudios una realidad. Y dijo: "Ahora, hermano mío, es tu turno. Ahora puedes ir a Núremberg a perseguir tus sueños, que yo me haré cargo de todos tus gastos”.
Todos los ojos se volvieron llenos de expectativa hacia el rincón de la mesa que ocupaba su hermano. Pero este, con el rostro empapado en lágrimas, se puso de pie y dijo suavemente “no, hermano no puedo ir a Núremberg. Es muy tarde para mi. Estos cuatro años de trabajo en las minas han destruido mis manos.
 Cada hueso de mis dedos se ha roto al menos una vez, y la artritis en mi mano derecha ha avanzado tanto que hasta me costo trabajo levantar la copa durante tu brindis. No podría trabajar con delicadas líneas el compás o el pergamino, y no podría manejar la pluma ni el pincel. No hermano, para mí ya es tarde. Pero soy feliz de que mis manos deformes hayan servido hayan cumplido su sueño”.
   Más de 450 años han pasado desde ese día. Hoy los grabados, óleos, acuarelas, tallas y demás obras de Alberto Durero pueden ser vistos en museos alrededor de todo el mundo. Pero seguramente usted, como la mayoría de las personas, solo recuerde uno. Seguramente hasta tenga uno en su oficina o en su casa
   Es el que un día, para rendir homenaje al sacrificio de su hermano, Alberto Durero dibujó: Las manos maltratadas de su hermano, con las palmas unidas y los dedos apuntando al cielo. Llamó a esta poderosa obra simplemente: "Manos", pero el mundo entero abrió de inmediato su corazón a su obra de arte y se le cambio el nombre a la obra por el de "Manos que oran".
 La próxima vez que veas una copia de esta obra. Mírala bien, Y ojalá que sirva para que, te sientas demasiado orgulloso de lo que haces...
                  Recuerda que en la vida "NADIE TRIUNFA SOLO"

 Pertenece a la  www