Camina el cieguito del campo
por su mundo a oscuras
sin poder reír, sin conocer travesura.
Su horizonte es un manto negro
al igual que su alma oscura
sus manitas tocan las cosas
sin percibir la hermosura.
Su madre ,llora que llora,
sufriendo terrible desdicha
desde que el niño nació
y no pudo ver la luz del día.
Ruega que ruega a Santa Sor Lucía,
pidiendo quedarse ciega ,
y a su hijo donar sus ojos.
Pero el niño a diario reza
porque no se cumpla el antojo
ello de qué valdría ?
Si ni su madre una reina,
ni su rancho un castillo serían.
AUTOR: RAMÓN PABLO AYALA
ARGENTINA
Camina el cieguito del campo
por su mundo a oscuras
sin poder reír, sin conocer travesura.
Su horizonte es un manto negro
al igual que su alma oscura
sus manitas tocan las cosas
sin percibir la hermosura.
Su madre ,llora que llora,
sufriendo terrible desdicha
desde que el niño nació
y no pudo ver la luz del día.
Ruega que ruega a Santa Sor Lucía,
pidiendo quedarse ciega ,
y a su hijo donar sus ojos.
Pero el niño a diario reza
porque no se cumpla el antojo
ello de qué valdría ?
Si ni su madre una reina,
ni su rancho un castillo serían.
AUTOR: RAMÓN PABLO AYALA
ARGENTINA
por su mundo a oscuras
sin poder reír, sin conocer travesura.
Su horizonte es un manto negro
al igual que su alma oscura
sus manitas tocan las cosas
sin percibir la hermosura.
Su madre ,llora que llora,
sufriendo terrible desdicha
desde que el niño nació
y no pudo ver la luz del día.
Ruega que ruega a Santa Sor Lucía,
pidiendo quedarse ciega ,
y a su hijo donar sus ojos.
Pero el niño a diario reza
porque no se cumpla el antojo
ello de qué valdría ?
Si ni su madre una reina,
ni su rancho un castillo serían.
AUTOR: RAMÓN PABLO AYALA
ARGENTINA